La Costa Blanca alberga una de las faunas marinas más ricas del Mediterráneo occidental, gracias a la combinación de aguas templadas, fondos rocosos y extensas praderas de Posidonia oceanica. En estas aguas es habitual encontrar meros, sargos, salpas, doradas y bancos de obladas, junto con especies más discretas como morenas, congrios, pulpos y sepias. Las praderas de Posidonia actúan como auténticos refugios de biodiversidad, ofreciendo hábitat a nudibranquios, gambas, bogavantes, estrellas de mar y a peces juveniles que se resguardan entre sus hojas. Además, es posible encontrar caballitos de mar, peces aguja o nacras —especies emblemáticas y sensibles que revelan la calidad del ecosistema litoral— convirtiendo la Costa Blanca en un enclave privilegiado para la conservación marina.
La Posidonia oceanica es uno de los ecosistemas más valiosos y frágiles del Mediterráneo. Su función como productora de oxígeno, estabilizadora del sedimento costero y refugio de biodiversidad es esencial para la salud del litoral mediterráneo. Sin embargo, también es uno de los hábitats más amenazados —por fondeos, contaminación, obras costeras o especies invasoras, tal como describe el programa POSIMED en su manual formativo de voluntariado.
Nuestro compromiso: ciencia ciudadana aplicada al mar Mediterráneo
Nuestras prácticas alineadas con POSIMED —la Red Mediterránea de Control de la Posidonia oceanica— establecen un marco científico y participativo para evaluar el estado de la pradera mediante estaciones de muestreo. Luonto SL adopta este enfoque en dos líneas:
Monitorización mediante técnicas normalizadas
- Medición de densidad de haces para evaluar la vitalidad de la pradera.
- Medición de cobertura de pradera y seguimiento de márgenes.
- Detección de especies invasoras, especialmente en áreas de mayor presión humana.
- Documentación fotográfica submarina con criterios homogéneos.
Buceo responsable y regeneración ambiental
- Evitamos cualquier anclaje sobre praderas de Posidonia.
- Promovemos rutas de buceo controladas que minimizan el contacto con el fondo.
- Reportamos avistamientos de especies sensibles o invasoras a las autoridades competentes.
- Divulgamos la importancia de los arribazones en playa como parte natural del ecosistema costero.
Coordinamos estas actividades en nuestro centro en la Costa Blanca, un hub de actividad ambiental que integra la zona de investigación aplicada coordinando las actividades científicas y garantizando que cada actividad tenga un componente de contribución real al conocimiento y la conservación marina. Las instalaciones funcionan como un entorno controlado y seguro donde se puede adquirir las competencias necesarias antes de trasladarse al medio marino, garantizando que cada inmersión en la pradera de Posidonia oceánica se realice con precisión, respeto y mínimo impacto ambiental. Nuestra zona de piscina permite trabajar de forma progresiva en aspectos esenciales:
- Simulación de maniobras complejas, como el manejo de cintas métricas, boyas de marcación o cámaras submarinas usadas en los muestreos.
- Práctica de tomas de datos: replicamos procedimientos como la colocación correcta de cuadrículas o el posicionamiento durante la medición.
- Ensayo de protocolos de comunicación subacuática, cruciales para el trabajo coordinado en los puntos de muestreo.
- Entrenamiento en el uso de equipos técnicos antes de su manejo en entornos naturales, aumentando la eficiencia y reduciendo errores.
- Control de flotabilidad fina, imprescindible para evitar el contacto con el fondo y con la Posidonia y perfeccionamiento del aleteo, reduciendo la resuspensión de sedimentos, uno de los factores que puede afectar negativamente a la pradera.
Desarrollamos las actividades con la excelencia técnica y el respeto ambiental que caracterizan a Luonto SL. Nuestra labor promueve una relación respetuosa con el mar y ayuda a asegurar que este paisaje submarino único llegue a las próximas generaciones.